Foto de Omar Souleyman

Conciertos de Omar Souleyman

seen live syria psychedelic world Pop

Aquí encontraras una lista no oficial de conciertos y festivales en los que actuara Omar Souleyman. Hacemos todo lo posible para mantenerlo actualizado, pero puedes ayudarnos corrigiendo o añadiendo conciertos. Omar Souleyman es un músico en lengua árabe y kurd...


 

 



Próximos

Diciembre 2024


Archivo


Omar Souleyman

Actualizado hace 2 meses

Omar Souleyman es un músico en lengua árabe y kurda de Ras al-Ayn, de la región noreste de Siria. Comenzó su carrera en 1994, trabajando con un grupo de músicos con los que todavía colabora. Alrededor de 500 álbumes en vivo y de estudio han sido puestos en circulación bajo su nombre, gran parte de ellos son grabaciones realizadas en bodas y regaladas a las parejas, que luego se copian y se venden en los quioscos locales. El músico Sirio fue descubierto por Kieran Hebden, conocido como Four Tet cuando era cantante de matrimonios en su país, y fue Hebden mismo quien produjo su álbum éxito Wenu Wenu. Su música ha llegado a un público más amplio en los últimos años debido al sello estadounidense Sublime Frequencies. Como resultado de ello, ha sido capaz de promocionarse internacionalmente y lanzar cinco álbumes. En 2011, Omar Souleyman actuó en Paredes de Coura en Portugal, en el Festival de Glastonbury de 2011, y el Chaos in Tejas en Austin, Texas, entre otros. También grabó tres remixes para Björk de la cara B de su álbum Biophilia, llamado Bastards. El pop es un género musical que probablemente usted indentificará con nombres como Madonna, Prince o Michael Jackson. Lo que seguramente jamás vendría a su cabeza (pop!) si le dicen POP es el sonido primitivo, rural, chirriante y exótico de Omar Souleyman, un granjero suní del noreste de Siria que ha conseguido que la música festiva de su pueblo –unos cánticos conocidos como dabke que suenan esencialmente en bodas o bailes- le interesen a Björk, Damon Albarn o Four Tet y en consecuencia a la comunidad indie global. Toda una sensación en Siria y a lo largo y ancho de todo el mundo para quienes le conocen, Omar Souleyman tiene en su haber más de quinientos trabajos editados en casete. Su música combina la electrónica con música árabe, instrumentos de cuerda, teclados y cantos “dabke”. Souleyman mezcla los sonidos tradicionales del folk turco/kurdo/sirio/iraquí con bases rítmicas y el resultado es un tecno marcianísimo que, claro, se ha convertido en un caramelito para hipsters aventureros cansados de sonidos blancos (el pop de toda la vida). La historia de Omar Souleyman es tan increíble que es imposible no interesarse por ella. Hablamos de un señor de pueblo que cuidaba a su ganado como medio de vida y que los fines de semana cantaba en bodas para ganarse un sobresueldo. En cada uno de estos enlaces presentaba a los novios como regalo su actuación grabada, lo que significa que hay circulando por Siria un número aproximado de 700 discos firmados por Souleyman (y algunos de ellos contienen canciones que duran una hora – chúpate esa Jethro Tull). Aunque nació en 1966, no fue hasta 1994 cuando se decidió por una carrera musical. ¿Por qué tan tarde? “La verdad es que no sé qué contestar a eso. De donde yo vengo, las cosas no son como en Europa: no hay expectativas relacionadas con la edades ni con las profesiones. Cada uno simplemente sigue su curso”. Un buen día, el músico californiano Mark Gergis, turista accidental en Damasco, se quedó fascinado con la voz de Omar, que salía de muchos puestos en los mercadillos de la ciudad. Gergis empezó a recopilar los trabajos de Souleyman y a editarlos en su propio sello: el primer contacto con el público occidental estaba hecho. Lo siguiente sería Souleyman abandonando su entorno rural para dar algún concierto en locales alternativos londinenses. Y de ahí a las mecas de la modernidad sonora occidental: el festival de Glastonbury, el de Paredes de Coura, el Chaos in Texas. De ahí también las colaboraciones con ciertas vacas sagradas del indismo. Así que aunque la música de Omar Souleyman sea dabke-folk-electrónica, él en sí mismo es un fenómeno pop. ¿Es consciente de hasta qué punto se ha convertido en un artista de culto entre la comunidad hipster? “No tengo ni idea de qué me hablas. Sé que a la gente le gusta mi música y que me reconocen a menudo, pero no sé qué quiere decir eso que preguntas”. O sea, no, no sabe. O sí, y prefiere hacerse el loco. Souleyman también prefiere pasar de puntillas por los temas políticos. No quiere dar una opinión sobre lo que está pasando en su país, ni sobre el trato que están recibiendo en Europa los refugiados sirios y así nos lo hace saber. Ahora vive en Turquía, después de que su pueblo, Ras al Ayn se haya convertido en inhabitable por las batallas entre separatistas turcos, el ejército sirio y las fuerzas rebeldes. Acudir a actuar a algunos conciertos (en Estados Unidos y Japón también le reciben con los brazos abiertos) se había convertido en una gimkana de emboscadas y tiroteos. Aún así, y a pesar de que su inesperado éxito le ha permitido viajar alrededor del mundo, si se le pregunta cuál es su ciudad favorita del mundo, lo tiene claro: “Mi pueblo y sus alrededores. Es mi hogar. Eso es todo”.